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La vuelta de las vacaciones nos devuelve a la cruda realidad, las hipotecas por las nubes, alimentos básicos intocables (aceite, azúcar, carne y pescado, etc.) y el material escolar (libros y uniformes) muchos más caros que en años anteriores. Existen previsiones y voces autorizadas que indican que posible entremos en recesión este otoño, motivo por el cual deberíamos incrementar la productividad de nuestro negocio, especialmente trabajando la parte digital de la empresa.
Pero no es una tarea fácil, cada día hay más negocios digitalizados, más competencia y más equipos de Marketing bien formados. De hecho, la tasa de conversión está bajando, es decir, que el consumidor medita cada vez más la compra de un producto, entra en una página web, entra en otra y finalmente termina comprando el producto más económico que satisfaga sus necesidades. Para el negocio digital, esto supone tener que invertir más tiempo y más dinero en publicidad (SEM o Social Ads) para obtener los mismos resultados.
Durante los últimos años, he estado impartiendo clases de Marketing Digital para Adecco y Red.es, Femxa y Grupo ATU donde he podido comprobar, in situ, entre empresarios y personal que se está preparando para ser Community Manager, que hay una serie de errores de principiantes que se repiten en numerosos proyectos.
1. Subestimar los negocios digitales.
El primer error que comenten muchos emprendedores es subestimar los negocios digitales y la competencia feroz que existe actualmente. He oído en más de una ocasión “como la cosa está muy mal y no encuentro trabajo, me voy a montar una tienda online”. Pues bien, es importante saber que para que el negocio funcione será necesario tener formación en Marketing Digital y después, dedicarle muchas horas de trabajo, tener constancia y mucha paciencia para obtener resultados.
Muchas empresas se han sumado a la transformación digital, esto hace que cada día existan más negocios digitales, que, sumado al avance de las nuevas tecnologías, la irrupción de la Inteligencia Artificial, hacen cada día más complicado triunfar en el mundo online.
2. La web la construyen por “el tejado”.
A la hora de construir la web (nuestra casa) es habitual comenzar por la búsqueda de una plantilla bonita, elegir las pestañas o categorías que tendrá la web y comenzar a poner texto como si no hubiera un mañana. ¡Error!
El primer paso para tener una buena web es que posicione nuestra empresa en los primeros puestos de las búsquedas en Google. Para ello lo primero que tenemos que hacer es un análisis de las Keywords o palabras claves que utilizan los usuarios para comprar o contratar un producto o servicio, así como la competencia.
En función de esas palabras claves, confeccionaremos la arquitectura de nuestra web, teniendo muy presente las claves del posicionamiento orgánico en buscadores (SEO). Es decir, nuestra web deberá incorporar en las URL, en los títulos, subtítulos y en los contenidos, esas palabras claves de búsqueda, así como sinónimos de las mismas, que utilizan los usuarios en Google para encontrar lo que buscan. Así mismo, deberá cargar rápidamente y tener buena usabilidad. Ahora ya solo queda elegir la plantilla, usar los colores de la marca, elegir el dominio (que incluya la palabra clave) y un buen hosting, etc.
Es recomendable destinar parte del presupuesto para publicidad en Google Ads o Social Ads, dado que el trabajo que realicemos con el SEO (posicionamiento orgánico) tendrá resultados a medio o largo plazo.
3. Ausencia de Blog. ¿Para qué lo necesito?
Google quiere ofrecer el mejor contenido a los usuarios de las búsquedas, por ello, una de las mejores formas que tenemos para posicionarnos en los primeros lugares es generar contenidos de valor para nuestra audiencia (entretenimiento, educación, inspiración, etc). Y eso no es subir la misma foto a todas las redes, es mucho más complejo. Tener un blog y alimentarlo periódicamente con contenidos de calidad (texto, imágenes, vídeos, podcast o infografías), contenidos demandados por los usuarios, sin duda nos ayudará a ser visibles, llevar tráfico a nuestra web y escalar posiciones en los resultados de las búsquedas de Google.
4. Todo el mundo es mi público objetivo.
¿Sabes qué es el “buyer persona”? Si no lo sabes, ya puedes ir definiendo un par de buyer persona diferentes para tu negocio. Si te sirve de ayuda, hazte estás preguntas ¿a quién le vas a vender? ¿Cuáles son sus datos demográficos? ¿sus gustos? ¿sus hobbies? ¿sus rutinas ¿Qué siente? ¿Qué le preocupa? ¿Por qué compra? ¿tiene hijos?, etc.
Cuanto mejor tengamos definido a nuestro público objetivo, mejor contenido podremos ofrecer a nuestra audiencia. Tener segmentada la audiencia y enviar el mensaje correcto a cada segmento nos ahorrará mucho dinero y nos aportará mejor ratio de conversión.
Comencemos por la red social donde esté nuestro público objetivo. No podemos estar en todas las redes.
5. Error 5: Objetivos sin especificar.
La mayoría de los emprendedores definen a grandes rasgos los objetivos generales, pero olvidan definir los objetivos específicos para cada objetivo general. Los objetivos específicos deben ser SMART (Sencillos, Medibles, Alcanzables, Relevantes y acotados en el tiempo). Dichos objetivos deben ir en la línea de los objetivos generales de la empresa.
Ejemplo: Objetivo general “tener más visibilidad”. Un objetivo SMART sería, “incrementar un 20% las visitas a la web en el próximo mes”. Es esencial definir bien los objetivos para luego poder analizar los resultados y realizar las correcciones pertinentes.
6. Estar en todas las redes sociales, por estar.
¿En cuántas redes sociales tiene perfil tu negocio? ¿En cuántas redes ofreces contenido de valor a tus usuarios con la frecuencia adecuada? Si estás en más de 2 redes sociales, y eres tu solo la persona que lleva el Marketing Digital de tu empresa, seguramente no estés publicando e interactuando lo que cada una de las plataformas requiere para que te de el alcance deseado.
Es interesante tener una estrategia de Social Medial, pero comencemos paso a paso. Primero en una red social, en la que esté nuestro público objetivo, y cuando veamos que comienza a dar sus frutos, añadir otra red social. Es imposible estar en todas las redes sociales y hacerlo bien en todas. Comienza por una o dos redes sociales. También debes pensar en el largo plazo, es decir, no solo seleccionar la red donde está mayoritariamente tu público objetivo, si no pensar también ¿en qué red social están las personas que te pueden comprar dentro de 5 años?
Deberemos tener un cronograma de la parte digital de la empresa, así como un calendario de publicaciones, donde figure el contenido, la red, la fecha y la hora de publicación entre otros datos.
7. Ausencia de medición y análisis de resultados.
Una vez definidos los objetivos SMART, tendremos que definir los indicadores claves necesarios para medir dichos objetivos, las estrategias y tácticas. En Marketing debemos monitorizar, medir y analizar los datos claves, las estadísticas de nuestra web y perfiles de redes sociales para ver si se están cumpliendo los objetivos. La información es poder, siempre y cuando seamos capaces de entenderla. Por ello, debemos seleccionar las métricas que se ajusten a nuestro tipo de negocio y objetivos marcados. Menos es más, con los indicadores necesarios será suficiente.
Si vas a emprender en el mundo digital, primero debes formarte y para posteriormente dirigir tu propia empresa, para ello deberás delegar las tareas más repetitivas y simplemente supervisar el trabajo realizado por tu equipo en la parte Online, con el fin de que puedas hacer crecer tu negocio de forma escalable.
Recuerda la frase de Warren Buffet, “contrata a los mejores y déjalos hacer lo que saben hacer. Si no, contrata a los más baratos y que hagan lo que tú les dices”.
En Marketing Digital Alicante podemos ayudarte con tu proyecto digital, solo tienes que contactar con nosotros, sin ningún tipo de compromiso y analizaremos tu situación actual y las opciones de crecer exponecialmente. ¡Contacta ahora!
Ángel Calvo Mañas